Cuál es la de plástico, cuál es la de vidrio?

Mamita y mi lunar.

Yo tengo un lunar. Tengo varios lunares, pero hay uno que es EL lunar.
Mi lunar adorado, mi marca registrada. Aquel que tantos miraron, algunos desearon y unos pocos saborearon. Mi lunar que siempre sirvió como referencia para los escotes. En la pre adolescencia que no se viera, en la adolescencia hasta el lunar no paro y en la actulidad ya se ve tanto que ni de referencia puede actuar, pobre.
Me senté en el sillón, segundos más tarde se sentó mi madre. Me miró, me observó. Hizo cara de quien ha descubierto algo nuevo y dijo: "¿Tenés un lunar?"
Toda una vida ignorandome. ¿Me estará empezando a ver ahora?

4:53 am
Terminé. Leí hasta la última coma. Sufrí desde la primera letra. Sufrí, ¿entendes?
Mil veces pensé en no leer más. Pero VOS querías que leyera. Y yo sufrí.
Ahora siento que me saqué un peso de encima. Que se fue un fantasma. Que desapareció una nube negra que sobrevolaba.
Ah, y basta de sufrir.

El 168 vino rápido. Recuerdos. Inevitables recuerdos. Miré la esquina. Aunque no la mire sé que está y me invade la nostalgia. Esta vez incluso ví la chacha de tenis. Pero no bajar ahí tiene un sabor raro. Empaña la situación. Pienso en vos. Pienso que cada vez que paso por ahí pienso en vos. Pienso que va a pasar mucho tiempo hasta que deje de pensar en vos cuando pase por ahí. Pienso demasiado. Recuerdo un viaje en auto hacia retiro. Giré mi cabeza sin percatarme dónde estaba. Vi ESOS baños. ESOS baños me recuerda a vos más que nada. Cuando veo ESOS baños, la sensación me inunda. Luego para, la vida sigue.
Almagro, locación de su nuevo depto (Supuestamente). No hago la asociación hasta que bajo del colectivo y empeizo a caminar. pienso que existe una remotísima posibilidad de cruzarnos o vernos a lo lejos. Siento miedo, pánico. No quiero verte. No quiero que me veas. Me tranquilizo diciendo para mis adentros que el barrio es grande y yo, de hecho, no sé por dónde vivis, que es enero y es muy probable que estés de vacaciones, que el día es lindo y seguramente estas haciendo alguna cosa lejos. Sin embargo, temo el encuentro. Trato de no mirar a quienes pasan a mi alrededor ni mirar hacia ningún edifico.
Llego a destino. Debo esperaren la calle. Espero 10 o 15 minutos. Por supuesto, parecieron 3 horas y media. Me sobresalto cada vez que pasa alguien. Me alivio al comprobar que no sos vos. Estoy inquieta, pienso que la situación es una mierda y pienso que la otra situación que atravieso también es una meirda y va camino a convertirse en algo peligrosamente similar a la tuya.

Fabricio.

Martina tiene 2 años y medio. Le gustó mi pulsera. Jugaba, trataba de sacarmela y decía algo acerca de un tal Fabricio. No entendí, supuse que se trataba de algún compañerito del jardín. De pronto, junta algo del cochecito. Como si se tratara de un bebe del tamaño de una naranja. Se lo acerca al pecho, le palmea la espalda. Me lo acerca con las manos y dice: "Hacelo dormir vos". Repito lo que ella hizo y se lo devuelvo. Ella lo acuesta en su cochecito. "Qué linda" pienso.
Nos sentamos a cenar. Ella deja su hamburguesa por la mitad y se sienta a jugar solita. Mientras juega, habla y menciona a Fabricio. Su mamá me dice:
- ¿Presentaste a Marian y Fabricio?
- Si, ya lo conocí a Fabricio. Lo hicimos dormir hace un ratito... digo jugando.
Ella dice "Es su ángel". Mi cara debe haber sido una mezcla de que tierno que le digas eso a la nena y para qué me lo decis a mi como si fuera cierto. Ella agregó "Me parece que lo ve en serio".
- Fabi! Mirá lo que decis... Es re normal que los nenes tengan amigos invisibles...
- Yo la conozco a mi hija y estoy segura de que ve algo.
Pienso en Griselda, me impaciento.
- Al principio me dió miedo, pero fabricio es bueno.
- No puedo creer que estemos teniendo esta conversación y que de hecho esté sintiendo miedo.
- No te preocupes. No vas a ver nada que no quieras ver.
- ¿Pero vos pensás que hay algo acá?
- La nena lo ve. Yo creo que los nenes ven angeles y espíritus. El otro día yo estaba en el living mirando tele. De pronto la escucho que dice "Vos quedate acá, ya vengo..." y entonces le pregunto "¿Con quién hablas Martina?" y ella me dice "Con Fabricio". Enotnces le pregunto "¿Quién es Fabricio?". Me miró con cara de no entender y dijo "El que está en la cocina". Me asusté un poco, pero dije "Si sos bueno, quedate. Sino, andate"
- QUÉ?!?!!!?! ¿¡Le hablaste a un supuesto espíritu?!
- Sí, porque la otra vez vió uno malo...
-¿¡QUÉ?! Vos crees esas cosas ¿y seguís viviendo acá?
- No, pero a ese le dije que se fuera.
- ¿Como que le dijiste que se fuera? ¿Y así como así se fue?
- Mirá, la nena vino corriendo a abrazarme diciendome que tenía miedo. Le pregunto que le pasa y me dice "Me da miedo el señor". Lo veía en la pieza... Así que dije "Andate", prendí la luz y parece que después de eso no lo vió más. Desde ese día dormimos con la luz prendida.
No podía creer lo que estaba escuchando. En un desesperado intento de calmarme, pensé que tal vez Martina estaba recordando gente que había visto por la calle o en una plaza. Seguía jugando. La miro:
- Marti, ¿Dónde está Fabricio?
No dijo nada, señalo justo detrás mio. Yo me tapé la cara y miré hacia otro lado. Juro que sentí miedo. Siento miedo todavía. Fabi se reía.
- No vas a ver nada que no quieras.
Yo pensaba "No me preocupa verlo o no verlo me preocupa saber que está".

Dormía. Mejor dicho, trataba de dormir. El calor era abrumador. Mi celular hizo su ruido que indica mensaje de texto. Entre dormida, lo miro. Mi hermano decía: "Griselda está perdida en once". Confundida, le contesto: "¿Qué querés que haga? Estoy en el chaco...". Otro mensaje: "No se. Llamala o algo, porque está perdida en once". Me despierto. Había sido un sueño. Pienso, ¿quién es Griselda?
Pasan los días. Imagino engaños, historias de amores furtivos, nombres de barcos. Hablo con mi hermano. No conoce ninguna Griselda, yo tampoco. Una amiga me dice que puede ocurrir que ese nombre sea una construcción. Pienso, nada. Estoy a la expectativa, sé que algo sucederá y dará sentido a mi sueño.
Mi papá, quien sabe del sueño, viaja a Buenos Aires. Vamos a buscar un auto con él y mi hermano a avellaneda. Volvemos. Mi hermano en su auto, nosotros en el nuevo. Mi papá, desacostumbrado a manejar por Capital mira todas las calles. Cada tanto perdemos de vista a mi hermano. En un momento dice: "Acá se te perdió Griselda". Estamos en once. Pienso en mi amiga diciendome que el nombre es una construcción. Recuerdo la patente que tuve hace unos 20 minutos en mis manos. GXW. Le comento mi descubrimiento. Él me mira incrédulo. De pronto, viene a mi mente una imágen de la parte trasera del auto. Sólo veo una cosa "Gol". Pregunto: ¿Este auto es un Gol?. Él dice: "Sí, un Gol power". Comprendo todo. El auto es Griselda! Estamos en once, mi hermano a la vista. Pienso que es probable que lo perdamos, pienso que puede ocurrir algún accidente o contratiempo. Me tranquilizo al recordar que tengo el cinturón puesto. Nada va a pasar, Griselda es el auto.

Él dijo: Por no querer ser una más, vas a terminar siendo una menos.
Fue como si me echara una maldición. A él le daba bronca que yo me empeñara en no ser una más en su vida. Por mucho que le moleste, no lo fui. No lo soy.
Pero me echó la maldición. Ahora vago por los caminos del olvido, condenada a ser una más en la vida de los hombre que me cruzo. Como si algún ejecutor macabro controlara desde el infinito y se riera con la satisfacción de la tarea cumplida.

Cosas que NO voy a extrañar del chaco: Ser el burro de carga de mi papá, que la temperatura normal sean 40 grados todos los dias y toda la noche todo el tiempo, los malditos mosquitos, no poder dormir mas de 3 horas seguidas por los ladridos de las perras o maullidos de gatos, entre algunos otros.

Cosas que SI voy a extrañar del chaco: Todo. Porque hasta ser burro de carga con mosquitos en 40º es mejor que la ausencia y el olvido.

La cena pasó rápido, entretenida. Los niños jugaban, corrían, gritaban. Era todo muy lindo, muy familiar. Después, tiraron unas cañitas voladoras que en la inmensidad del campo y del cielo estrellado no sonaban mucho. Yo tomaba un brevaje que acusaba llamarse "naran-pol". Debía ser muy Pol, porque de naran, no tenía nada. Era verde y sabor lima-limón. Repito, debía ser muy pol.
De pronto fueron las 12. Empezaron los saludos. Esa es mi parte favorita. Todos nos saludamos con todos (con los acostumbrados dos besos) y compartimos y está todo bien.
Lo que sigue es un poco aburrido. Conversaciones en las que ya están todos medio borrachos y se repiten temas y se dicen boludeces y se confiesan cosas. Luego, a esperar que se terminen las botellas de vino para ir a hacer noni. A veces, hago balances del años, pienso en la gente que no está, imagino cómo será el año que viene, como sería tener una vida distinta... Esta vez pensé, con algo de tristeza: ¿De quién te enamoraste?
Espero que este año sea mejor, que sea lindo. ya hay algunas cosas nuevas, proyectos. El balance de este año me dió: El año en que se gestaron proyectos pero ninguno se concretó. Que el balance del 2008 sea: El año en que se concretaron todos los proyectos. Y como dice la publicidad de quilmes que a mi siempre me gusta recordar "Lo que todos queremos que pase, este verano puede pasar".

Año nuevo es algo que sucede mientras estoy de viaje en el chaco. Perdió todo significado para mi. Como estamos en le medio del campo, tampoco se notan grandes cambios.
Para terminar bien el año, me embarqué en una fantasía voyeurista. Me bañé con 4 ranas mirándome desde los azulejos. Y para alentar el espíritu del nuevo año, decidí estrenarme una bombacha.
Llegamos a la casa del capataz y, como había anticipado, se trataba de un encuentro multitudinario. Cosa que hacía varios años no acontecía. Fue un momento alegre. Había mucha gente y niños. A saber:

-Rollo: Capataz. Un tipo jóven, pero avejentado por el trabajo de campo. Aél le gusta llevar una vida simple y tranquila. Levantarse temprano, mates, caballo, campo, almuerzo, siesta, campo, cena y a dormir. Está endurecido por los años, pero en el fondo es un dulce y sólo quiere lo mejor para su familia.

-Mary: Esposa de Rollo y madre de 5 hijos. Nació, se crió y vivió en el campo toda su vida. Se dedicó a sus hijos, una vida difícil si me preguntan. Está perdidamente enamorada de los dos varones y reniega con las 3 mujeres. Es buena, pero tiene sus rayes.

-Gustavo: Hijo mayor de Rollo y Mary. Trabaja en el campo desde que tiene edad suficiente para hacerlo. Dicen las malas lenguas que no le da el marote. Vive con una mujer (Sandra), que tiene una hija (Andrea)vy un hijo de ambos (Sandrito). Vive en lo que hace años era una escuela (dentro del campo), donde mi abuela daba clases y mi papá y sus hermanos hicieron sus primeros años de primaria. Ese pibe si que es bueno. Mango que ganaba, lo gastaba en cosas para sus hermanas menores y la madre. Ahora tiene una familia y es distinto, razón más que suficiente para que Mary (la madre) odie a Sandra (su mujer).

-Sandra: Esposa de Gustavo. Es la única por estos pagos con un título. Es maestra y ahora da clases en una escuela que queda a un par de kilómetros. Es una mina inteligente y se anima a sentarse en la mesa con hombres y hablar a la par de ellos y discutirles. (Otra razón para no ser muy popular entre las mujeres). A mi me car bien, estoy contenta de que esté aca. Además, su casa parece un parque. Tiene florcitas, el pastito parejo y bien cortado, canteros, adornitos, un sendero con arbustos, es un lindo paisaje. Claro, otra razón para que le hagan macumbas. Su hija, andre, ya tiene 8 años. Es linda, aparentemente buenita, aunque cada tanto le sale la maldad de adentro. Es de las más grandecitas de la nueva generación. El hijo que tuvo con gustado, Sandrito, es precioso. Rubiecito, ojos claros, todo un señorito. Se portó como un santo. Es el más chiquito de todos.

-Mariela: Es la segunda hija de Mary y Rollo. Se lleva unos poco meses con Gustavo (Mary dice que los crió como mellizos).Siempre le costó la escuela. Se banca algunos gastos vendiendo productos por cartilla (a quién carajo le vende y cómo esa gente consigue plata para pagarle es un misterio para mi). Debe tener alrededor de 27 años y hace 9 tuvo un hijo, rafaelito. Rafael no tuvo suerte. Parece que por aquellos años de su concepción, su madre andaba en cualquiera. Quedó embarazada sin saber a quién atribuirle la paternidad. Ocultó su embarazo en todo momento, incluso trató de abortar varias veces. Usaba una faja. Allá por los 7 meses, se fué un poco en micro, un poco en lancha, un poco a caballo a comprar ropa a Paraguay. A la vuelta, tenía dolores tan fuertes que se tenía que sentar en el piso. La llevaron de urgencia al médico. "Tiene peritonitis" dijeron los padres. El médico la metió en un quirófano y salió con rafaelito, dándole la feliz noticia a los recientes abuelos. Producto de todas las imprudencias de su madre, el chico nació con un retraso mental y físico. Cumplió 9 años hace poco. No camina, no habla, usa pañales, no maneja sus manos (ni siquiera las puede abrir o estirar completamente). Gracias a una operación que le hicieron recientemente, el chico se puede sentar en una silla de ruedas, que de hecho, no usa, porque no la puede mover por si mismo. Es un divino. Hace cara de pícaro. Pero las sensaciones que tengo cuando estoy junto a él y a su madre son contradictorias.

-Pipi: El hio del medio. Tiene 2 o 3 años más que yo. Recuerdo que solíamos coquetear de pequeños. Hace 3 años se juntó con Leli y tuvo un hijo. O tuvo un hijo y se juntó, no se bien el orden de los hechos. El nenito es muy parecido aél, pícaro, le dicen chucky. Esta chica Leli es muy muy linda. Me atrevería a decir que la más linda de todos los presentes (no de cara, pero tiene lomazo). Viven juntos, pero lejos del campo, en un lugar que le dicen "el 16". Mi papá lo aprecia mucho a Pipi, quiere que sea el próximo capataz.

-Tita: La ante última. Siempre fue aplicada, obediente, buena alumna. Es la mejorcita, la que más satisface los deseos de sus padres. Está estudiando enfermería y está de novia con un chico, hijo de un tipo que tiene campo a unos pocos kilómetros de aca. Mary quiere que tenga un hijo, Sandra dice: "Primero que se reciba, después que tenga todos los hijos que quiera". Me alegra que haya tomado buenas decisiones.

- Gisela o Chu: La más chica, malcriada. Hace lo que se le canta, siempre fue rebelde. Ya estuvo internada por zarparse con el eskabio. Es, en mi opinión, bastante linda. Buenas gambas, ojos claros. No acusó una desbordante inteligencia y brillantez en el pasado. Esperemos que el futuro sea mejor.

-Santos: Es un peón de la estancia. Honestamente, siempre me gustó. Tiene onda el chabón. Además, me conoce de chica y es uno de los poco que no me tiene miedo. Está casado o juntado con carmen y tiene dos hijos. Con Carmen nunca tuve mucho contacto. Parece que es una buena mina, tranqui. Estaba su hermana.

-Joana: Es la hija mayor de Santos. Nació y se crió en la estancia. Tiene 10 años y es la más grande de la tercera generación, aunque pasó mucho tiempo solita. Tiene un hermanito menor de unos 3 o 4 años y es igual al padre. Es un amor ese nene, un señorito.

Además, vinieron 2 hermanos de Rollo y un sobrino. Era la primera vez que loa veía, así que no tengo mucho para decir, salvo que el hermano menor es igual a él.

Después de pasarme dos horas limpiando la heladera (en el medio se cortó la luz y se largó a llover), decidí limpiar el baño. Yo no soy tan afecta de la limpieza, pero cada vez que iba al baño a cargar el balde había un olor a meo terrible. Además, había unas cositas negras en la bañera, por las cuales tuve la siguiente conversación con mi padre:
Yo: Che, ¿No habría que limpiar la bañera? Me parece que eso es caca de muerciélago.
Papá: Ay, Mariana! Mira que va a ser bosta de muciélago... Es de sapo...
Yo: Aaahhh, me quedo más tranquila. (Mientras me visualizaba echandole 8 litros de lavandina).
Al día siguiente, mi papá seguía en sintonía limpieza. Dicen que hace bien hacer una limpieza general antes de fin de año. Hacer una limpieza general a una casa a la que hace más o menos 30 años que no se le hace una, no es la mejor de la ideas. Mucho meos si lo tiene que hacer uno. Después de limpiar, fue el momento del fuego.
Mi papá ama el fuego. Su pasatiempo favorito es armar unas fogatas tipo 7/8 d ela noche. Además, cocina todo a la parrilla. esto implica que antes de almorzar o cenar hay que pasar por la instancia fuego.
El resto del día fue como estar en temaiken, pero más copado. Tuvimos que ir a buscar unos limones a la quinta (llevamos sobrero y todo). Entre otras cosas, vi cómo es la planta de maní. (recordatorio para mi misma: NO IR A LA QUINTA EN SHORT Y OJOTAS). A la vuelta, pasamos por el potrero de unos toros de inseminación que hicieron. Había unos señuelos en frente. Todo muy bonito, pero más d elo mismo (las vacasa ya me las sé de memoria), salvo por los toros que parecían fotocopiados. Todos iguales. También paramos en el lugar de los chivos. Me enamoré. La mayoría estaban comiendo lejos, pero unos chiquitos y dos grandes se quedaron. Eran muy mansitos. Los podíamos acariciar, como perritos. Incluso uno trató de chuparme un dedo y sentí sus dientitos y tenían guampitas. Me llevaría uno a casa.
Mientras seguíamos preparando el almuerzo, aparecieron los monos. Los monos son un tema aca. Siempre aparecen, pero es honestamente, un espectáculo. Los machos son negro, las hembras rubias (como blacks on blondes). Son de esos que se cuelgan de la cola y suelen venir en manada a comer coquitos, mangos y hojitas de eucalipto. Lamentablemente, este año no vi ningún tucán, ni loros. Si vi perros, mosquitos, moscas, mariposas y unas avispas que dan miedo. Esta noche es año nuevo. Tiene pinta de multitudinario. Ya veremos que sucede.

Update temaiken: Vimos un nido de boyero. googleenlo, es muy lindo!
Update 2: Vinieron los tucanes!! Una bandada de 12 revoloteando de rama en rama a 10 metros. También vi un pájaro carpintero. (Esto ya parece el diario íntimo de una niña de 10 años. O lo es?)

Hoy llegamos al campo. Me gustaría poder capturar lo increíble de este lugar. Tiene sabor a cosa conocida, a soledades, a lugares especiales. Podría estar horas escribiendo acerca del campo y su particularidades, la gente, las costumbres. Me voy a limitar a la experiencia de éstos días. Vinimos en la camioneta. Yo no tengo guita para viajar en taxi y me tengo que comer el garrón de andar en bondi para todos lados, pero mi papá tiene dos camionetas, un auto y se acaba de comprar otro. Esta camioneta me gusta. Tiene aire acondicionado y creanme que en el chaco, es como tocar el cielo con las manos. Fue un lindo viaje. Las típicas charlas que pasan por los temas: Clima, novedades/chismes del lugar, campos aledaños, istoria familiar y siempre hay algna parte enciclopédica tipo cátedra. esta vez, aprendí sobre bebidas alcoholicas. Tomamos mate, hecho y cebado por mi. Vimos como llovía a lo lejos, que siempre me resulta sorprendente. Por suerte, logramos llegar sin agua.
Intercambiamos algunas palabras con Mary (por ahora no voy a explicar quién es) y vinimos a la casa. Siempre me pareció hermosa la casa. Si bien el campo tiene 114 años, la casa debe tener entre 70 y 80. Una de las cosas que siempre me llamó la atención es que a esta casa la pintaron una sola vez, cuando la construyeron y si no fuera por los túneles de las termitas, la pintura sigue intacta. Es una pintura que hacían unos indios. No sé qué secreto habían descubierto, pero lograron hacer una pintura que duró 70 años en una casa en el medio del campo. allá por la década del 60, los truchos que venden pinturas que duran 10 años con suerte y viento a favor, hicieron desaparecer a los indios.
Descargamos el auto rápido y a los pocos minutos, la tormenta amenzaba. "Por favor que no se corte la luz" Pensé. Mientras acomodabamos las cosas, mi papá me pidió que limpiara la heladera.
Les hago una pequeña reseña acerca de las heladeras en este lugar. Siempre hubo dos heladeras: una en la alacena y otra en el living. El detalle es que la heladera del living era una siam de la época de mis abuelos que ya no funcionaba muy bien. Se conservaba porque cuando veníamos de a muchos, la otra no daba a basto. La de la alacena era un poco más moderna, pero siempre tuvo 3 problemas: Era chica, perdía agua y no cerraba (trababamos la puerta con un tronco). Acá quiero decir que la del living tenía un sistema de cierre tipo freezer de frigorífico y en sus ultimos tiempos no abría. Dos heladeras, una no abría, la otra no cerraba.

Después de almorzar, me dormí la siesta más larga de mi vida. Qué placer dormir en una cama! Me cortó un poco dormir porque llvía y hay techo de chapa. Incluso tuve una serie de interrupciones, entre ellas un gato que tienen aca (3 perras, 2 gatas, una tortuga y una de las perras está presuntamente preñada). Hacía mucho que no dormía con un gato a los pies. Por momentos me despertaba y lo veía durmiendo en las posiciones más bizarras, incluso para un gato. Me terminé despertando a las 8 de la noche. Así como lo hoyen, ,e atorré todo. El detalles es que a las 9 y media tenía un casamiento. Prometía, al menos, una noche disferente.
Como era de esperarse, culpa de mi padre, llegamos tarde. De hecho, de casualidad no nos perdimos el arroz. la iglesia estaba supervacía. El novio puede besar a la novia y empezó a sonar una banducha que había por ahí. Uno de los integrantes era un guaso con un bajo. No solo estaba de espaldas a la audiencia, sino que no tocaba! Rasqueteaba cn un dedo y se movía al mejor estilo cumbianchero de sábado tropical. Saludé a varias personas que no conozco, pero parecía saber quién era yo. Conocí a la novia de mi primo Alejandro y después nos fuimos a la fiesta. Mi estómago ya lo imploraba. Llegamos al salón, más gente desconocida y el morfi que no llegaba más. No tenía grandes expectativas, salvo cenar, observar la flora y fauna del lugar y volver a hacer noni.
La pinta de trola debe ser costumbre por estos pagos, porque el trolaje era impresionante. Había trola pendeja y trola baqueteada para todos los gustos. El resto era todo normal, típico casamiento familiar. La comida tardó, pero estuvo bien. Me senté en una mesa en la que había un niño de lo más lindo y simpático, que me entretuvo gran parte de la noche. Cada tanto, la novia giraba al rededor de las niñas presentes para deslumbrarlas con su vestido (que la verdad estaba bueno). Lo único malo fue una pendeja de mierda horrible que junto con su horrble madre y hermanito/a bebé se sentaron detrás mio. No paraba de moverse y de pelotudear agarrandose de mi silla. Sale un grillete para la nena de la mesa dos!Nos fuimos temprano, cuando empezó la mísica.

El viaje siguió sin sobresaltos. No pude dormir nada de nada, pero me acompañó la música del celular. Cuando llegué me pasó a buscar mi papá (tarde) y fuimos a la casa.Estaba terminando de acomodarme, charlando con mi primo, mostrando videos de mi sobrina cuando llegó un visitante. Escuché que mi papá dijo "Está Mariana, ahora no sé dónde se metió..." Me ve y dice: "Esta Juanchi, te quiere saludar."

Juanchi es un amigo de mi primo Alejandro que conocí cuando tenía 15 años. La primera vez que lo ví me pareció fachero, le pone onda. El asunto es que este pibe tuvo la mala suerte de hacer lo que hacemos casi todos y no sacarla barata. Andaba en auto con unos amigos, todos en pedo y chicaron. Si mal no recuerdo, el chico que manejaba murió y Juanchi quedó muy mal. Hubo un juicio y mucha guita de por medio, que los padres de Juanchi se ocuparon de gastar en viajar. Él quedó con muchas consecuencias del accidente, entre ellas, que sus amigos se alejaran de él. Entonces, aquel año, mi pimo decidió llevarlo a pasar año nuevo con nosotros al campo. Yo iba y venía en mis pantalones con bolsillos a los costadps y mis remeras que me tapaban y ellos hacían la suya. Lamentablemente, notardé en descubrir que Juanchi no era más que un súbdito de mi primo que lo seguía, tomando de su vaso y eskabiandose desde temprano. Era gracioso (o triste, no sé), cuando Juanchi ya estaba en pedo hacía como un golpecito con el pie al caminar.

Llegó la noche del 31. Yo me había llevado un vestido azul con flores blancas. Todos quedaron sorprendidos por el cambio cuando me lo puse ( parece que mi atuendo anterior no me favorecía en absoluto). Juanchi no fue una excepción. Esa noche se sentó cerca mio, me habló, debo decir que la remó. Yo tenía 15 años, él 21 o 22 y por esa época, a mi me parecía una incosteable diferencia de edad. Además, estaba mi papá al lado y me daba un poco de verguenza todo el asunto. En fin, pasó a la historia como un descarado, aunque siempre lo recordé con algo de cariño.
Volviendo al 2007, nos cruzamos.Juanchi: Hola!yo: Hola ¿Cómo andas?j: No tan bien como vos... pero bien.y (risita nerviosa): Bueno, gracias.La conversación siguió como una típica conversación entre dos desconocidos. Él, cada tanto, me agarraba las manos y me decía bajito "que linda" o que bien que estaba, Y yo sé que no es del todo cierto, pero igual me alegró, me alimentó el ego y me puse colorada. Luego, nos abrazamos, nos dimos los dos besos reglamentarios del chaco, seguimos un poco más abrazados y cada uno siguió su camino.